El camote es rico en nutrientes esenciales para la salud, pero su consumo debe ser limitado en personas con cálculos renales o alergias, ya que podría provocar efectos adversos en ciertos casos.
Mejorar nuestra salud a través de la alimentación es posible si aprendemos a seleccionar lo que consumimos y lo que debemos evitar. Frutas, verduras, carnes, legumbres, cereales y lácteos son algunos de los mejores alimentos para proporcionar al cuerpo los nutrientes esenciales que fortalecen el sistema inmunológico.
Uno de los alimentos que más beneficios aporta es el camote, un tubérculo proveniente de la planta del mismo nombre, que se consume como hortaliza, según el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación de España. Sus beneficios para la salud se deben a su alto contenido de vitaminas A, C y E, carbohidratos, betacarotenos, potasio y fósforo.
Precauciones con el consumo de camote
Aunque el camote aporta nutrientes importantes que ayudan a fortalecer el cuerpo y prevenir enfermedades, no todas las personas deberían incluirlo en su dieta, ya que podría tener efectos no deseados en ciertos casos.
Los especialistas advierten que las personas con antecedentes de cálculos renales deben evitar el consumo de camote, ya que este contiene oxalato, una sustancia que se combina con los cálculos de calcio. Para disolverlos, los médicos podrían tener que aumentar la ingesta de calcio. Aunque, según los Institutos Nacionales de la Salud de Estados Unidos, la mayoría de los cálculos renales se eliminan de forma natural, en algunos casos pueden quedar atrapados en las vías urinarias, bloqueando el flujo de orina y causando un dolor intenso.
Además, las personas con alergias diagnosticadas también deberían evitar el camote. Aunque las alergias a este tubérculo son raras, podrían presentarse reacciones cruzadas con otras verduras. Ante cualquier síntoma tras consumirlo, lo más recomendable es consultar a un especialista para obtener un diagnóstico y tratamiento adecuados.