En una llamada con el G7, el presidente Biden reafirmó el apoyo incondicional de Estados Unidos a Israel tras el ataque con 180 misiles balísticos iraníes, mientras el ejército israelí promete una contundente respuesta y se preparan nuevas sanciones internacionales contra Irán.
En un comunicado emitido este miércoles, la Casa Blanca informó que el presidente Joe Biden participó en una llamada con los líderes del G7 para discutir “el inaceptable ataque de Irán contra Israel y coordinar una respuesta”, la cual incluirá la imposición de nuevas sanciones.
“El presidente Biden y los miembros del G7 condenaron de manera contundente el ataque de Irán contra Israel. Biden reafirmó el total apoyo y solidaridad de Estados Unidos con Israel y su población, además de subrayar el firme compromiso de Estados Unidos con la seguridad de Israel”, señala el comunicado.
En una conferencia de prensa, el portavoz del Departamento de Estado, Matthew Miller, calificó el ataque iraní como “una escalada sin precedentes” y defendió el derecho de Israel a responder.
Miller destacó que, aunque Estados Unidos puede expresar su opinión a Israel sobre cómo debería actuar, es el gobierno de Netanyahu el que tomará la decisión final.
“Ellos son un país soberano y toman sus propias decisiones. Tenemos diálogos a varios niveles sobre lo que creemos que es mejor para ellos y para la región, pero en última instancia, las decisiones son suyas”, explicó Miller.
La noche del martes 1 de octubre, 180 misiles balísticos iraníes impactaron en territorio israelí; aunque la mayoría fueron interceptados, algunos alcanzaron su objetivo, provocando la muerte de un palestino en Jericó (Cisjordania ocupada) debido a los restos de una intercepción.
El jefe del Estado Mayor de Israel, el teniente general Herzi Halevi, declaró este miércoles que Israel planea responder al ataque iraní y tiene “la capacidad para alcanzar y golpear cualquier punto de Medio Oriente”.