La paciencia de Biden hacia Israel estaría llegando a su fin

El presidente de Estados Unidos, Joe Biden, está cada vez más frustrado con la negativas del primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, de llegar a acuerdos que permitan dar fin al conflicto en la Franja de Gaza, dijeron al portal Axios cuatro funcionarios estadounidenses con conocimiento directo del asunto.

Antes de que Biden colgara, Netanyahu había rechazado su petición de que Israel liberara los ingresos fiscales palestinos que está reteniendo, según la información dada a conocer por Axios este 14 de enero.

Según el portal estadounidense, el principal motor de la frustración de Biden es la resistencia de Netanyahu a avanzar en peticiones que son prioritarias para Estados Unidos. Biden y sus asesores creen que Israel no está haciendo lo suficiente para permitir la entrada de ayuda humanitaria en Gaza.

También están frustrados por la falta de voluntad de Netanyahu de discutir seriamente los planes para el día después de la guerra y su rechazo al plan de Washington para que la Autoridad Nacional tenga un papel en la Gaza posterior a Hamás.

Según Axios, si Tel Aviv no reduce significativamente sus operaciones en Gaza es probable que a Biden le resulte cada vez más difícil mantener el mismo nivel de apoyo a la campaña militar de Israel. De hecho, la visita del secretario de Estado Antony Blinken a Israel la semana pasada no hizo sino exacerbar las frustraciones en el seno de la Casa Blanca y del Departamento de Estado, dijeron los funcionarios estadounidenses.

A Blinken y a su equipo les quedó claro durante su viaje que la negativa de Netanyahu a liberar los ingresos fiscales palestinos está obstaculizando los esfuerzos de Estados Unidos por impulsar reformas en la Autoridad Palestina, según dos fuentes familiarizadas con las reuniones del secretario de Estado.

El presidente palestino, Mahmud Abás, dijo a Blinken en Ramala que estaba dispuesto a formar un nuevo gobierno -a petición de la administración-, pero subrayó que no podría funcionar sin dinero, y los ingresos fiscales son una parte importante del presupuesto, dijeron las fuentes.

Este 13 de enero, Netanyahu afirmó que nadie impedirá que Israel triunfe en su ofensiva contra el movimiento palestino Hamás y minimizó la demanda por genocidio interpuesta por Sudáfrica en la Corte Internacional de Justicia.

«Nadie nos detendrá, ni La Haya, ni el Eje del Mal, ni nadie. Es posible y necesario continuar hasta la victoria, y lo haremos», declaró Netanyahu en una conferencia de prensa. «Hay una ley internacional y dice una cosa muy sencilla: se expulsa a una población y no se le permite regresar mientras exista el peligro. Y el peligro existe. Hay combates allí [en el norte de Gaza]», añadió.